EXCURSIÓN A ORDESA

Había que aprovechar que aun no ha llegado del todo el invierno y visitar el valle de Ordesa en todo su esplendor otoñal. Así que esta vez dejamos la moto y las bicis en casa y cogimos nuestras botas de montaña, decididos a patear un poco. En vez de seguir la carretera principal nos desviamos por la carretera comarcal para poder disfrutar mejor del paisaje y de los pueblos. Nos detenemos en un pequeño pueblo, Lárrede que es como una gran maqueta, todo muy cuidado, con sus casas de piedra. Allí nos detuvimos un rato y dimos un paseo hasta el viejo puente colgante.
Seguimos camino a Ordesa, pasando por el Cotefablo ya podemos disfrutar de todos los matices de ocres y naranjas... por fin llegamos a Ordesa, cerca de la 1 del mediodia. Conseguimos aparcar en una pradera atestada de coches. Hace un día completamente despejado, tomamos la pista del fondo del valle pero al llegar a la cruz decidimos no seguir por ella sino desviarnos por la senda que trepa a través del hayedo hacia Cotatuero, la subida se nos hace dura pero merece la pena. Es un recorrido mucho más tranquilo que la popular pista que va a la cola de caballo. Llegamos al circo de Cotatuero con su espectacular cascada, tras tomar un ligero tentempié seguimos hacia la Faixa as ollas desde la que de puede disfrutar de unas esplendidas vistas del valle y del río Arazas. Aun nos quedaba un buen trecho pero conseguimos llegar hasta el fondo del valle aun de día, juntandonos alli con las riadas de gente que bajan de la cola de caballo, nos queda una hora más de caminata, pero el esfuerzo ha merecido la pena, las vistas desde la faja son espléndidas y nos quedan muchas más. Tenemos que volver.
Llegamos al coche con los últimos rayos de sol entrando en el valle, ya solo queda montarnos y volver "piano, piano" a casa, donde nos esperan dos gatitas deseando que se les den mimos.

LÁRREDE



Puente Colgante



ORDESA

El Hayedo

La subida


Circo de Cotatuero

De Ordesa

Vistas desde la Faja